Rubén Lopera
El Tiempo, Bogotá
Marzo 3 de 2010
Esta frase del Presidente de Colombia tiene una gran verdad, independientemente de su ideología política, al referirse al fallo de la Corte Constitucional de Colombia, que falló en contra del referéndum de reelección presidencial. Da la idea de que quien sea el futuro Presidente del país y sus dirigentes deben seguir el rumbo en muchos problemas del país, sobre todo en seguridad y defensa, salud y que siga el impulso en las inversiones para la prosperidad de todo el país.
Personalmente, creo que la decisión de la Corte fue acertada, sin entrar en lo jurídico o en la forma o fondo del tema discutido, por no conocerlo; pero sí como reflexión de futuro en relación con el poder y el tiempo que permanecen los presidentes; desde un presidente de un país, un club, un banco o de cualquier institución, porque en la gran mayoría de los casos se corrompen, se vuelven tiranos, se creen reyes o se enferman en el poder, y se forman las mafias y no dejan que nadie entre u opine en ese antro de poder.
El señor Presidente de Colombia puede influir todavía mucho en la decisión de los ciudadanos en el futuro de la política colombiana desde cualquier trinchera, como él lo dijo; desde inclinarse por algún candidato de su preferencia hasta voltear la tortilla a última hora. Él conoce quiénes han sido sus amigos fieles o quiénes seguirán su rumbo en lo político, económico, seguridad y defensa. Creo saber quién será su candidato presidencial en lo referente a seguridad y defensa del país, al igual que el de las relaciones con Venezuela.
Si el rumbo se pierde, puede ser muy peligroso para el futuro de la nación. Los enemigos están adentro y afuera del país y en las fronteras, y están al acecho de cualquier debilidad del gobernante de turno. No se diga de las Farc, paramilitares, narcotraficantes, bandoleros, sicarios, que están ahí.
La madurez de los pueblos que han visto, oído y palpado las debilidades y fortalezas de sus gobernantes no se pueden dejar engañar por palabras bonitas del primero que venga a tratar de convencer o cambiar sus principios, valores e ideales.
Candidatos: ahora les toca a ustedes enamorar a un pueblo, que en un 70 por ciento ha aceptado a un presidente que se va, pero que estará atrincherado.
No dudo de personajes nuevos que saldrán al ruedo o que ya lo están, y que tienen ideas renovadoras, útiles y progresistas. También saldrán los marxistas, socialistas, "revolucionarios", izquierdistas con sus ideales, porque todo es posible en una sociedad democrática. También los inversionistas de campañas electorales, o que financian a estas, empezarán a dar sus aportes, para luego pasar factura. "Ojo abierto" con esto y con los países vecinos.
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