Uriel Ortiz Soto*
El Espectador, Bogotá
Octubre 29 de 2009
Pensar que el Comercio Andino va a desaparecer, por las bravuconadas del presidente Venezolano, Hugo Chávez, sería como tapar el sol con las manos y echar por la borda todos los logros obtenidos a través de cuarenta años de integración.
No olvidemos que el Comercio de Integración Andina, tiene raíces tan profundas, que data desde los tiempos de la gran Campaña Libertadora. Hay que tener en cuenta que mientras existan los Recursos Humanos, frente a los procesos de desarrollo, como en el caso de la Comunidad Andina de Naciones, CAN, no se requiere de componendas políticas, basta con cumplir con los protocolos y normas de control de calidad. El Comercio Andino, tiene su manejo asegurado desde hace varios siglos. Lo que pasa, es que tenemos que rescatarlo de gobernantes intrusos y disociadores.
Si queremos un Comercio Andino, fuerte, sin boicoteos y de cara al desarrollo, hay que exigir a sus socios - gobernantes en la próxima cumbre, que se sustraigan de su manejo y lo dejen al arbitrio de las Cámaras de Comercio Binacionales que existen legalmente, para que sean ellas, quienes lo administren, constituyéndosen en una Confederación Andina de Comercio.
Es cierto que la Comunidad Andina de Naciones, Can, atraviesa por la etapa más crítica de toda su historia. Muchos analistas dirán que la forma más expedita es disolverla; pensar en este despropósito sería lo peor para el desarrollo social, económico, cultural y político, para la subregión, con la consecuente pérdida de millones de empleos. Pero, tampoco puede seguir en las condiciones en que se encuentra. Debemos ser conscientes, que desde sus inicios, ha sido con alguna frecuencia el escenario donde los gobernantes de turno saldan sus discrepancias políticas, porque ven el camino más expedito y fácil para el revanchismo, aplicando cláusulas de salvaguardia inocuas y retaliaciones vergonzosas, perjudicando sin ningún escrúpulo, la celeridad del Comercio y el desarrollo subregional sin importarles que con tal actitud llevan a la ruina a miles de empresarios, que desde siglos atrás vienen construyendo la actividad comercial fronteriza con sentido de pertenencia, estrechando con ella la hermandad en la Subregión. No olvidemos que la filosofía de la Integración Andina, Can; es precisamente su fortalecimiento, más no la de obstaculizarla con posiciones politiqueras y ambivalentes.
Los usuarios del comercio multilateral andino, deben hacer valer sus derechos promoviendo ante sus respectivos gobiernos, planes y programas de desarrollo a través de las diferentes organizaciones gremiales. Es un proceso tan natural que lleva varios siglos de desarrollo y sus únicos dueños son los usuarios y habitantes de la Subregión, sin olvidarnos claro está, de las normas legales vigentes que lo regulan. Frente a todas estas dificultades, valdría la pena motivar a la presidencia, pro tempore, actualmente en manos del Presidente de Perú, Alán García, para que permita a las Cámaras de Comercio Binacionales, buscar la viabilidad de presentar en la próxima cumbre de Mandatarios, el proyecto de Acuerdo Comercial antes enunciado basado en los siguientes puntos:
1º- Constituir la confederación de Cámaras de Comercio Binacional Andino; con el fin de proponer a sus gobiernos, que, deleguen en ella su manejo y administración comercial, bajo unos parámetros previamente acordados.
2º- Revisar los Mecanismos de Integración: Que la Confederación de Cámaras Binacionales Andinas, se encargue de revisar los Mecanismos de Integración, puesto que, desde su fundación, no han sufrido modificación alguna, por lo tanto se encuentran obsoletos. Es indispensable modernizarlos.
3º- Revivir el estudio del Arancel Externo Común, instrumento indispensable para que el comercio extrafronterizo opere con celeridad.
4º- Que el presente acuerdo entre Mandatarios, y Comerciantes, para que tenga fuerza de Ley, se tramite ante los respectivos Cuerpos Legislativos de cada País y finalmente ante el Parlamento Andino.
5º- Vincular las Decisiones comerciales Andinas a la: Organización Mundial del Comercio, O.M.C.
* Consultor Comercio Internacional
No hay comentarios:
Publicar un comentario