Ejecutar, ejecutar y ejecutar

Editorial

El Colombiano, Medellín                 

Marzo 26 de 2009

El Presidente de la República reconoció que la crisis mundial tendrá efectos reales sobre la economía colombiana por la vía de la reducción de las exportaciones. El Ministro de Hacienda y Crédito Público, por su parte, anunció que la próxima semana revisará a la baja, el crecimiento esperado de la economía, que estaba en un tres por ciento, después de que se conozca la cifra consolidada del Producto Interno Bruto del año anterior.

Tener un crecimiento positivo en 2009, que esté, posiblemente entre el uno y el dos por ciento, no es una mala noticia para el país. Nuestros vecinos cercanos están teniendo ajustes muy drásticos en sus economías por efecto de las caídas de los precios de la soya, el cobre, el aluminio, el acero y el petróleo. Nuestras exportaciones tendrán una caída en dólares que será amortiguada por la devaluación de este año. La solución para reactivar la economía colombiana viene de adentro. En lo que se está fallando es en la inversión del Estado.

Por eso el llamado de atención del Gobierno central a las administraciones municipales y gobernaciones. El año anterior, en medio de una desaceleración, el consolidado de las cifras fiscales arrojó un inesperado equilibrio, cuando lo que debería haber ocurrido era que el gasto y la inversión públicas aumentaran de manera contracíclica y compensaran la reducción en la inversión y el consumo privados.

Quienes perdieron el 2008 en reactivación de la economía fueron los alcaldes y gobernadores. Es importante recordar que la cifra clave que marcó la fase de desaceleración de la economía fue la caída del 29 por ciento en inversión pública en el primer trimestre de ese año. En este momento, un año después, los entes territoriales tienen cuantiosos recursos en el sistema financiero, que deberían estar activando la demanda agregada en el país.

La administración pública está siendo demasiado lenta para ejecutar sus presupuestos. No ha logrado hacer una eficiente ejecución del presupuesto de inversión, como tampoco lo ha hecho con proyectos especiales que serían hoy urgentes para reactivar la economía.

Es importante recordar que con un crecimiento por debajo del cuatro por ciento, nuestra economía está eliminando empleo. Por eso, un crecimiento del dos por ciento, como el proyectado, ya tiene un alto costo. El llamado del Presidente Uribe a ejecutar de manera rápida las inversiones públicas corresponde al reconocimiento de esa prioridad social.

Por eso es urgente y prioritario ejecutar, ejecutar y ejecutar. En el ámbito local, se deben hacer los mayores esfuerzos por anticipar las obras de "Las Vías de la Montaña", el Túnel de Oriente, Pescadero y Porce, así como los programas de vivienda de interés social.