Violencia y reitegración

El Editorial

El País, Cali

Marzo 18 de 2009

En un país como Colombia, al que las múltiples expresiones de la violencia le han causado graves daños a su estructura social, es una obligación dialogar sobre las causas y las consecuencias de este fenómeno y buscarle soluciones a los menores que han caído en las redes de la compleja realidad nacional. El seminario ‘La reintegración de jóvenes en conflicto con la ley”, que tendrá lugar en la Universidad Javeriana, es un esfuerzo importante para encontrar el camino. 

Hoy y mañana, Cali podrá escuchar experiencias que se han vivido en el mundo en los procesos de reintegración social para quienes han estado involucrados en guerras, tanto como para aquellos que, por causa de la marginalidad y los conflictos sociales, han protagonizado episodios de violencia. Y tendrá también la oportunidad de oír a quienes, desde la empresa privada, han logrado hacer coincidir los motivos que animaron a los creadores de esas compañías con el propósito de ayudar a reconstruir la confianza y la armonía en las comunidades a las cuales pertenecen. 

¿Por qué hacer este ejercicio? Sin duda, después de un gran esfuerzo realizado en los últimos años, el país ha logrado reducir la violencia y neutralizar gran parte de los grupos que la generan. Pero apenas está iniciando la tarea de reincorporar a sus integrantes a la sociedad y convertirlos en seres que aportan y son capaces de proporcionarse una vida digna, en la cual existe una esperanza. Como también parece confundido en la obligación de entender y manejar el desorden que campea en las ciudades con algo que complemente la ineludible tarea del Estado de perseguir y castigar las infracciones a la ley que destruyen la convivencia en los centros urbanos.

 
Bajo esa perspectiva, no resulta suficiente hablar de pos-conflicto, tratando de significar que la actividad criminal de las guerrillas, el paramilitarismo y la delincuencia común son cosa del pasado. Como no puede hablarse de una guerra que no encuentra fin y que extiende sus tentáculos en forma paulatina a aquellos sectores donde se sienten la marginalidad, la exclusión y las necesidades básicas insatisfechas. Esos son los dos extremos de la realidad colombiana, en la cual los jóvenes, además de ser los protagonistas del momento, se convierten igualmente en agentes reproductores de esas diferencias, a no ser que la comunidad actúe para evitarlo. 

Por eso, como bien lo dicen sus organizadores, el seminario es necesario para promover la restauración, a partir de facilitar la labor de las organizaciones sociales que la promueven. Para ello, el evento tendrá como objetivos “conocer las bases científicas del comportamiento violento” y “difundir experiencias exitosas de reintegración de ex combatientes y jóvenes en conflicto con la ley”, además de tratar de generar conciencia sobre la necesidad del compromiso entre los líderes privados y los públicos para lograr ese objetivo. 

Bienvenidos el seminario internacional ‘La reintegración de jóvenes en conflicto con la ley’ y sus participantes. Durante estos dos días, Cali se complace en ser escenario de un certamen trascendental para la paz de Colombia.