domingo, 6 de diciembre de 2009

Terror cultivado

Óscar Tulio Lizcano

El Colombiano, Medellín

Diciembre 6 de 2009

"Corrimos a ver qué pasaba y cuando llegamos al sitio donde se encontraba 'Familia', vimos que se le había estallado una mina -empezó a contar Isaza-. Lo vi sentado, recostado sobre un árbol de guamas. Se le habían partido sus patas, le colgaban a la altura de las dos rodillas, solo las unía un pedazo de cuero", me contó Isaza. De quien habla es de un guerrillero que conocí en mi secuestro.


En otra ocasión, un grupo de guerrilleros al mando de Carranza, actual comandante del Frente 36 de las Farc que opera en Antioquia, se enteró de que el Ejército venía siguiéndolos. Carranza ordenó minar todo el camino por donde iban a pasar, quedaron varias minas sin estallar aún sembradas. El comandante guerrillero ordenó retirarlas. Daniela, una de las guerrilleras, encontró una camuflada en un radio de onda corta. Compañera de Chilapo, otro guerrillero. A él fue a quien Daniela le entregó el radio y a quien la explosión dejó totalmente ciego, sin el brazo derecho.


Los guerrilleros son víctimas de su propio invento. Son tragedias muy semejantes a las que ellos mismo hacen con sus actos terroristas contra el Ejército y la población civil. En muchas ocasiones no recuerdan dónde las siembran y son víctimas de estos actos infames.


Los campos están sembrados de minas que amenazan la vida de cientos de miles de civiles inocentes. Si de traer estadísticas se trata, en el 2008, 780 colombianos, cerca de tres por día, padecieron sus terribles consecuencias de muerte y mutilación.


En 2002 se pudo establecer que el 31 por ciento de las acciones de la guerrilla estaban relacionadas con este tipo de artefactos. Ese porcentaje se disparó al 64 por ciento y todo parece indicar que para este año se incrementará de tal forma que hasta el Hospital Militar tuvo que destinar todo un pabellón para los militares heridos por las minas antipersonal. Llegan ambulancias con soldados mutilados y aún así muchos ignoran esta dramática situación por la falta de sensibilidad. Hay soldados mutilados por todos lados, algunos afectados sicológicamente.


De otra parte, esta situación está golpeando el estado de ánimo de las tropas, pues no le temen tanto a enfrentarse a la guerrilla, pero sí a pisar una mina. La guerrilla encontró en esta táctica una estrategia para contener el avance del Ejército, sin importarle que ellos mismos puedan ser sus víctimas.


Las Farc se convierten en el grupo armado terrorista que más las usa en el mundo. Su uso se ha incrementado en los terrenos donde cultivan la coca. Ha incluido estos artefactos explosivos en su estrategia militar para proteger laboratorios y cultivos.


Ahora bien, es desalentador que paradójicamente se les repudie a los grupos armados ilegales por esta macabra acción terrorista contra civiles y militares y, sin embargo, Estados Unidos, China y Rusia las utilizan como mecanismo de guerra para evitar invasiones. Por ello se niegan a suscribir el tratado de Ottawa que es el instrumento jurídico internacional que promueve el no uso de este tipo de mecanismos, que tanto daño le han hecho al mundo.

No hay comentarios: