Un informe preocupante

Editorial

El Heraldo, Barranquilla

Diciembre 14 de 2009

Una vez más, la educación pública en Colombia quedó en entredicho tras conocerse un informe preliminar realizado por la Procuraduría General de la Nación.

El reporte anual de la entidad en lo que a educación respecta, busca medir el nivel de la básica y la media en todo el país, enfocándose particularmente en la cobertura y en el acceso que la población infantil y adolescente tiene a las aulas públicas.

La conclusión expuesta por el Procurador en el IX Encuentro de Gobernadores y Gobernadoras por la Infancia, la Adolescencia y la Juventud no, fue poco alentadora: “Pese a los avances en la determinación de políticas públicas y en la adopción de una normatividad que determine los responsables del sistema educativo, el derecho a la educación aún no está garantizado para todos. Son precisamente los grupos más vulnerables a quienes no se les garantiza este derecho”.

La Procuraduría aseguró en su informe, que el promedio del nivel de cumplimiento de lo expuesto en los Planes de Desarrollo de cada departamento en este año no pasó de 52 puntos sobre 100. Sin embargo, hay seis departamentos en los que el cumplimiento en lo que va corrido del año con relación a las metas propuesta sobrepasa el 75%.

La Guajira, con un 92.4% ,no sólo es el único departamento costeño dentro del grupo sino el de mejor desempeño, de acuerdo con la Procuraduría.

Las críticas no se quedaron ahí. El informe cuestionó la información fragmentada que recibió de algunas de las secretarías de educación y la completa desatención al asunto por parte de otras. Sólo 23 gobernaciones remitieron la documentación solicitada. Bolívar, Córdoba, San Andrés y Providencia y Sucre hacen parte de los entes territoriales costeños que no hicieron entrega oportuna de las estadísticas requeridas.

En lo que respecta a la calidad de la información, la Procuraduría calificó lo enviado por Barranquilla, La Guajira y Cartagena con el término ‘medio’, mientras que lo hecho por Santa Marta, Magdalena, Sucre y César, con el adjetivo ‘bajo’.

Pero, más preocupante aún, es que la Procuraduría haya hecho énfasis en que ninguna de las entidades territoriales hubiese reportado, tal como le fue requerida, toda la información relacionada con el manejo de los presupuestos en el año.

Ante esta situación, las lecturas que se le pueden dar a la actitud de las secretarías de educación son muchas. Sin embargo, hay una que pareciera saltar a la vista.

Paradójicamente, la calidad y buen desarrollo educativo en sus territorios, su razón de ser, pareciera no ser prioridad para muchas de ellas. Si bien, el no entregarle a la Procuraduría los documentos requeridos no significa que no estén haciendo bien su trabajo, la desatención a este tipo de evaluaciones denota descuido o cierto temor a la evaluación.

Cuando del tema educativo se habla en Colombia pareciera lloverse sobre mojado, debido a la cantidad de problemas del sector. Cuando los colegios no están en cese de actividades por las huelgas impulsadas por los maestros debido a problemas de pagos, la educación está dando noticias negativas sobre el desempeño de los estudiantes en pruebas estatales como las del Icfes.

Y es que a diario, la calidad del conocimiento que reciben un alto porcentaje de los niños y adolescentes de este país está amenazada por problemas administrativos, de corrupción y por las pésimas condiciones de infraestructura de la mayoría de las escuelas.

La educación como un derecho que debe garantizarle el Estado a su población es vulnerado frecuentemente en Colombia. Si bien hay esfuerzos como los logrados en Bogotá con la gratuidad educativa durante los primeros años escolares en el sector público, el gran reto de la cobertura en todo el territorio, sobre todo en zonas vulnerables como el Chocó, sigue aún sin resolverse.

Asimismo, el tema educativo sigue teniendo muchas debilidades en nuestra región. En lo que a cobertura, deserción y calidad se refiere, no salimos bien librados.

Que sea este reciente informe de la Procuraduría la mejor oportunidad para debatir seriamente sobre el tema educativo, para recordar que todo el proceso liderado recientemente por el Ministerio de Educación durante el desarrollo del nuevo Plan Decenal de Educación no debe ser letra muerta, y aún más importante para tener presente que la educación siempre será la base fundamental para la construcción de una mejor sociedad.