jueves, 24 de septiembre de 2009

Seguridad Democrática y Segunda Reelección

Por Uriel Ortiz Soto

El Espectador, Bogotá

Septiembre 24 de 2009

Para justificar la segunda reelección del presidente Uribe, nada más acertado que remontarnos a los inicios de su primer mandato – 2002 / 2006 – cuando el país se encontraba prácticamente que encañonado por los grupos que operaban al margen de la Ley: narco- guerrilleros, narco paramilitares, delincuencia común, y toda laya de delincuentes tenían azotada toda la geografía nacional.

Recordemos las pescas milagrosas operadas por estos criminales que cada fin de semana ocurrían en las carreteras a través de las cuales se producían secuestros, extorsiones y atracos contra indefensos ciudadanos y muchas veces contra familias enteras; no hay que olvidar tampoco, las voladuras de oleoductos, centros de salud, puestos de policía, hospitales, iglesias y poblaciones enteras, que tuvieron que ser reconstruidas, puesto que, los grupos insurgentes las destruyeron. También hay que mencionar los miles de empresarios y dueños de fincas que por razones de seguridad se habían ausentado de sus predios y centro de producción, hoy en día, han reiniciado plenamente sus actividades. Todo lo anterior, gracias a los programas de Seguridad Democrática, implementados por el Gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez.

Era tal el desconcierto y la zozobra de los ciudadanos, que, para salir de las ciudades y permanecer en las áreas rurales y centros de recreación, hubo necesidad de implementar el programa: “Viva Colombia, viaja por ella” con el fin de organizar caravanas de viajeros a distintos lugares, escoltados por la Fuerza Pública. Fueron muchas las bandas de delincuentes y facinerosos que mediante estos acompañamientos se desarticularon y sus integrantes cayeron bajo el imperio de la Ley.

Hay que reconocer que gracias a estos esfuerzos, el País, aunque con algunas limitaciones se ha recuperado notablemente en materia de seguridad y bienestar social. Como consecuencia lógica la confianza inversionista y la inversión extranjera están pasando por un buen momento. La crisis económica de los dos últimos años por lo menos ha sido posible contenerla en buena parte, debido a las políticas de buen manejo a través de su equipo económico. Aunque la tasa del desempleo continúa creciendo, la razón es bastante explicable: se debe a los continuos torpedos al comercio binacional colocados en contra de nuestro País por el gobierno de Venezuela y últimamente del Ecuador, con este último se encuentra en estado de recuperación.

Por todos estos buenos desempeños, Colombia ha logrado firmar varios Tratados de Libre Comercio, TLC, con Países como: Chile, Canadá, los del Cono Sur, y actualmente se encuentra en trámite el de Colombia con la Unión Europea, UE. El TLC, con los Estados unidos, podemos estar absolutamente seguros, que se firmará en pocos meses dado que es de imperiosa necesidad y conveniencia para las partes.

Es indudable que el Referendo para la segunda reelección del Presidente Uribe, no obstante pasar su trámite ante el Congreso de la República, con serias dificultades y cuestionamientos, que, muy seguramente se traducirán en demandas ante la Corte Constitucional; estará lleno de dificultades y es muy probable también que por las razones conocidas por todos los Colombianos, la Honorable Corte, lo declare Inconstitucional. Sin embargo, tendremos que decidir si votamos por la segunda reelección del Presidente Uribe, o nos sometemos a que muy posible sea el Polo Democrático Alternativo, con la ayuda de Chávez, quién nos gane las próximas elecciones presidenciales. Total, de aquí en adelante vendrá un debate nacional bastante interesante: las universidades y todos los sectores, sociales, económicos y productivos, deben terciar en él, con el fin de que los falladores tengan en cuenta el pensar y el querer de la opinión pública nacional. Desde ya sabemos cuál es la posición de los diferentes partidos y movimientos políticos, pero, en el alma nacional se ocultan razones de mucho peso a favor de la Segunda Reelección del Presidente Uribe.

Hay algo que llama la atención y es que en medio de semejante debate tan candente, varias firmas encuestadoras han recorrido diferentes ciudades y están en concordancia con similares guarismos y resultados dándole al Presidente Uribe, una mayoría, para el caso en que vuelva a ser candidato presidencial. Es apenas obvio que las instituciones democráticas, se encuentran atravesando por situaciones de enormes dificultades: con un Congreso seriamente cuestionado, pero, con la ventaja de que la actividad política se está depurando de tanto pillo y delincuente indeseable que se involucran en ella, simplemente para satisfacer apetitos personalistas.

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