martes, 13 de octubre de 2009

Apoyo a la competitividad. Ley antitrámites.

Elsa Gladis Cifuentes

El Nuevo Siglo, Bogotá

Octubre 13 de 2009


De acuerdo con el plan “Visión Colombia 2019” es meta para el Estado consolidar un Gobierno para el ciudadano. Así, en el año 2019 todas las entidades del Estado atenderán en línea a sus usuarios, y el trámite personal y el uso del papel en las mismas habrán desaparecido.


Para que esta visión de Estado al servicio del ciudadano sea realidad en los plazos previstos, debemos trabajar desde los diferentes escenarios en construir un Estado Comunitario que responda a las necesidades de los ciudadanos y facilite su relación con el poder público.


La iniciativa legal, fundamentada en los principios rectores de la política antitrámites, consignada en el Documento Conpes 3292 de 2004, será sustancial en la mejora del funcionamiento interno de las autoridades administrativas, incrementando la efectividad, la obligatoriedad de unificar la información del Estado para así brindar gratuidad y oportunidad en el suministro de registros y licencias por medios tecnológicos al alcance de la gente.


Hoy día, Colombia es un modelo para Latinoamérica en materia “antitrámites”; de acuerdo con el Informe que realizan el Banco Mundial y la Corporación Financiera Internacional Doing Bussines, en el que miden y comparan el clima de negocios entre los países.


Colombia fue reconocido sucesivamente en 2007 y 2008, como uno de los 10 países más reformadores a escala mundial y de la región.


Esto indica que se han logrado grandes avances en la aplicación de los medios electrónicos a través de las páginas Web, por parte de las entidades estatales del orden nacional en aspectos como la divulgación de la información normativa, el acceso a formularios para la realización de trámites de manera gratuita, asignación de turnos, preguntas frecuentes, páginas para niños, respuesta a peticiones, quejas y reclamos, entre otros.


La Ley Antitrámites pretende simplificar los procedimientos administrativos de los sectores públicos que afectan a los usuarios y empresarios para lograr una mayor confianza y competitividad en la gestión administrativa del país.


Buscamos una política pública que propenda por una función moderna y transparente, que se sustente en el uso de herramientas tecnológicas masivas para permitir a los ciudadanos conocer, acceder y realizar los procedimientos administrativos de su interés de manera ágil, efectiva y transparente, generando así confianza en el ciudadano.


El medio tecnológico juega un papel muy importante en la simplificación de los trámites, en cuanto a registros, conformación y liquidación de sociedades, suscripciones de libros, actos y documentos ante las Cámaras de Comercio, supresión del delegado de la Superintendencia de Sociedades a través de las sesiones virtuales de empresas vigiladas y la menor presencialidad en los trámites ante la Superintendencia de Industria y Comercio en lo que respecta a las patentes, signos distintivos y nuevas creaciones.


En síntesis, la nueva Ley antitrámites les dará a los colombianos una ventaja competitiva en el mundo empresarial que nos permita alcanzar y sostener la mejor posición en el entorno socioeconómico nacional e internacional.

No hay comentarios: