Extensión agrícola en Colombia

Juan José Perfetti del Corral

El Colombiano, Medellín

Octubre 2 de 2009

La columna de la semana pasada sirve de marco para tener una mejor comprensión sobre la situación actual de la extensión agrícola en Colombia. Una reciente encuesta realizada por la firma de consultoría Iquartil para el Programa Midas de Usaid, ahondó en los temas del acceso, el uso y la demanda de asistencia técnica agropecuaria entre los productores agropecuarios del país. La muestra consideró a productores de diferentes tamaños a lo largo de la geografía colombiana.

Uno de los temas que se indagaron en la encuesta es si en Colombia predominan los servicios de asistencia técnica o los de extensión. Los resultados de la encuesta señalan que, en general y sin mayores diferencias entre grupos de productores, predomina el servicio de asistencia técnica tradicional por encima del de extensión. Por su parte, los temas que en general más demandan la atención por parte de los servicios de asistencia técnica son las "técnicas para mejorar la producción". En los otros temas, tales como la escogencia de variedades o el manejo de los recursos naturales, se registran menores niveles de utilización de dichos servicios.

Con respecto al uso que hacen los productores agropecuarios de los servicios de asistencia técnica, se encuentra que un 60% de los productores del país han buscado y obtenido dichos servicios. Cuando se observan las diferencias en el acceso y el uso de asistencia técnica por tamaño de productor, se encuentra que un porcentaje alto de los grandes productores, 66%, utiliza regularmente dichos servicios, en tanto que sólo el 45% de los más pequeños lo hace.

De otra parte, los servicios de asistencia técnica son, mayoritariamente, prestados por cuatro tipos de organizaciones: las Umatas, los gremios, los vendedores de insumos y los asistentes técnicos particulares. Los servicios de las Umatas se dirigen, principalmente, hacia los pequeños productores, los de los gremios se concentran en los medianos y grandes productores, los servicios de los vendedores de insumos agropecuarios no diferencian entre tamaño de productores pues, en general, los diferentes grupos de productores los utilizan en igual proporción y los asistentes técnicos particulares prestan sus servicios, preferencialmente, a los medianos y grandes productores.

Finalmente, al indagar sobre algunos atributos de los servicios de asistencia técnica se encuentra que los productores agropecuarios se muestran de acuerdo con que este servicio se preste en el mismo municipio, que la Umata no debe desaparecer, y que dicho servicio debe ser gratuito e individual y que debe concentrarse en aspectos específicos.

En Colombia hay unos servicios de asistencia técnica agropecuaria que se mueven entre los extremos del espectro de prestadores del servicio, esto es, financiamiento público y pago privado por el servicio. En el intermedio operan otros servicios que, como los gremios, tienen estructuras de financiamiento especiales, como es el caso de los fondos parafiscales, o los vendedores de insumos que, a través de la venta de este tipo de productos, impulsan los servicios de asistencia técnica. Esto hace que la base institucional y organizacional para la prestación de los servicios de asistencia técnica agropecuaria sea reducida, pero con una gran fortaleza: el hecho de ser descentralizada.

El que una parte importante de productores agropecuarios, especialmente medianos y grandes, puedan acceder de manera regular a los servicios de los asistentes técnicos privados y que, simultáneamente, aquellos se encuentran satisfechos con dichos servicios, indica que en Colombia existe y opera un mercado de asistencia técnica agropecuaria.

Simultáneamente, la existencia de otros tipos de instituciones y organizaciones, como las Umatas y los gremios, evita que aquellos productores que no tienen los ingresos suficientes para pagar los servicios privados de asistencia técnica, queden excluidos de los mismos.