"Este gobierno no se ha rajado en ninguna materia"

José Obdulio Gaviria (entrevista)

Vangaurdia Liberal, Bucaramanga

Marzo 9 del 2009

 José Obdulio Gaviria está de trasteo. Tras seis años de ser el consejero y mano derecha del presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, se prepara para dejar la Casa de Nariño el próximo miércoles.

 Desde su oficina, invadida por las cajas donde empaca los más de 100 libros que conforman su biblioteca personal, el hombre de confianza del Primer Mandatario habló con Colprensa sobre su futuro político y el del presidente Uribe. Asegura que ahora su tarea será “jalonar, o por lo menos, empujar” el carro de la victoria del año 2010.

Con el tono imperturbable de siempre, Gaviria habló sobre los señalamientos que ha recibido en el tema de las ‘chuzadas’ telefónicas del DAS. Además, aseguró que en este Gobierno las puertas para el acuerdo humanitario “están cerradas”.

 ¿A qué se va a dedicar cuando deje el cargo como consejero presidencial?

En lo personal retomo mis actividades académicas y familiares. En lo público he dicho que la idea es jalonar o, por lo menos, empujar el carro de la victoria del año 2010. Para ello hay que hacer sacrificios.

¿De qué forma se vería ese sacrificio. Se ve dirigiendo el partido de la U, la campaña de reelección o como jefe de debate?

 Dirijo el Centro de Pensamiento Primero Colombia. Hay que defender lo que he llamado el cuerpo de doctrina del presidente Uribe. Líderes con cuerpo de doctrina no se encuentran a la vuelta de la esquina. Ese es un fenómeno histórico, en Colombia. Cuerpo de doctrina han tenido Nariño, Bolívar, Santander, Núñez, Gaitán y, ahora, Uribe.

¿Las actuales políticas de gobierno estarían en riesgo si el Presidente no le apunta a una segunda reelección?

La campaña de 2010 va a tener una confrontación evidente: Uribismo enfrentado a solución del conflicto negociada. Lo ideal para el uribismo es que el líder natural, quien aún tiene gran energía y aglutina varios sectores, pudiese correr. En un sistema parlamentario nadie dudaría que es conveniente y posible la continuidad de Uribe; sin embargo, en el sistema presidencial siempre se pone en duda eso.

¿Es decir que usted preferiría que el sistema fuera parlamentario?

 Eso sería lo ideal. Pero por ahora es mejor no profundizar. Si no hemos fortalecido partidos, cómo vamos a pretender que haya un gobierno de partidos.

 ¿El fortalecimiento de partidos es una materia en la que el Gobierno se ha rajado?

El Gobierno no se ha rajado en ninguna materia.

 ¿Pero ha insistido en una Reforma Política y no la ha logrado en más de seis años?

 No, lo que pasa es que todo tiene su tiempo. Esperemos que este año y medio sea de consolidación y que el trabajo de Luis Carlos Restrepo y de los dirigentes de los partidos uribistas, fructifique.

¿Qué piensa del proyecto de reelección?

 Estoy completamente seguro de que ese trámite lo ganamos. Mi confianza alcanza el 100%.

¿Pero hay voces que aseguran que habría un trámite ilegal?

 Están equivocados, aquí hay una especie de empapeladores profesionales que todo lo convierten en un crimen; un claro ejemplo fue votar la reelección.

Si el Presidente decidiera no correr, ¿A quién vería usted como un posible reemplazo?

 Al mejor, y ese lo decide el pueblo. 

‘Chuzadas’ telefónicas

¿No le parece de suma gravedad que la Casa de Nariño diga que no supo lo que venía sucediendo dentro de una institución como el DAS, íntimamente ligada al Gobierno?

Idear, ordenar, interceptar, grabar, publicar o utilizar, comunicaciones ilegales es un crimen. En el Gobierno, es decir el Presidente y sus ministros, hay un impedimento ético y jurídico para hacerlo. Nosotros seguimos pidiendo pruebas que demuestren los supuestos vínculos de funcionarios de la Casa de Nariño en ese episodio. Hasta ahora no aparece nada.

¿De dónde pudieron venir las órdenes?

 Primero hay que averiguar si es verdad.

¿Cree que pudo ser un montaje?

 De la Revista Semana yo espero todo. Más cuando su director (Alejandro Santos) es capaz de organizar una reunión de juerga con el Fiscal General (Mario Iguarán).

¿Usted cómo tuvo tantos detalles de esa reunión?

 Porque los vi, cuando me enteré que estaban reunidos y yo estaba cerca, quise tenerlos de frente, porque los antioqueños no le corremos a nada; como soy amigo personal de hace años del Fiscal, quise decirle de frente, usted por qué está en esta reunión sin las condiciones de ley.

El ex presidente César Gaviria ha dicho que desde este Gobierno siempre se han ordenado  interceptaciones, y que quienes están en la izquierda son considerados como enemigos.

 A veces el ladrón juzga por su condición. Enfáticamente puedo decir que ninguno de nosotros lo ha hecho. Y me gustaría recordarle que lo mejor de la izquierda está en el Gobierno.

¿Entonces cómo define el Gobierno al Polo Democrático Alternativo y al mismo Partido Liberal?

Partidos de oposición. Ojalá se volvieran muy serios. Que no les diera miedo decir que las Farc son unos asesinos y que admiren y feliciten a la Fuerza Pública por sus acertados golpes.

Acuerdo humanitario

Con la renuncia de Luis Carlos Restrepo, ¿Quién asumirá las labores de mediador?

La gran comisión de paz es la que logre la desmovilización voluntaria o el desmantelamiento de las Farc, el Eln y lo que queda de las bandas criminales. Si hay movimientos en ese sentido, ‘ad honorem’ y ‘ad hoc’, Luis Carlos (Restrepo) estará presente.

¿No es necesaria la presencia de una persona liderando esos acercamientos?

 Con el Ejército y la Policía será suficiente.

¿Está cerrada con este Gobierno la posibilidad de un intercambio humanitario?

 Totalmente. Es que el intercambio no se hace entre un Gobierno y una banda terrorista. Sería traicionar al pueblo colombiano.

La Iglesia, en especial de El Vaticano, como mediadora con los grupos al margen de la ley?

El Papa Benedicto XVI no convencería nunca a las Farc o al Eln; claro está, de pronto hay un milagro. Quizá, de un momento a otro le caiga un rayo en la cabeza al ‘Mono Jojoy’, y se convierta.

¿La guerrilla está diezmada?

Políticamente no alcanza a ser un asunto estadístico en Colombia. Como organización criminal es mucho más poderosa. Más, cuando se ha vuelto tan amiga de los grandes capos del narcotráfico, especialmente de Don Mario.

¿Qué pruebas tienen de esa amistad?

Muchas. Incluso en los últimos archivos de computadores se encuentra una especie de telaraña de unión entre productores de hoja de coca, dueños de laboratorios y vendedores. En todas las tres etapas están metidas las Farc.

¿Acabar a la guerrilla y a las bandas del narcotráfico se logra con otros cuatro años de Álvaro Uribe o en cuantos más?

Eso depende de las circunstancias, sin embargo, los resultados de estos últimos dos o tres años son extraordinarios, por lo que uno podría creer que hay un acelerador natural.