viernes, 4 de septiembre de 2009

Volver a creer en la política

Por Adriana Gutierrez

La Patria, Manizales

Septiembre 4 de 2009

La formación de los niños y jóvenes de hoy será fundamental para que actos bochornosos como el que un congresista utilice su curul para beneficio personal sea borrado en el futuro.

Desconcierta por momentos el acontecer político colombiano. No sabe uno realmente cómo juzgar la situación que se vive en el congreso y la de sus integrantes. Hace quince días cuando vi a la senadora Nancy Patricia Gutiérrez manifestar con enfado y con sentido de humanidad el rechazo por el trato al que ha sido sometida por parte de la Sala Penal de la Corte, me vi reflejada en ella, sentí la tristeza que ella estaba sintiendo. Debo confesar que cuando los demás integrantes del Congreso manifestaron su reclamo a la Corte por lo que se consideraba en su momento un atropello por el allanamiento de las residencias de unos congresistas, compartí la protesta de sus colegas, por un posible acto revanchista, que bien pudiera afectar a parlamentarios que actúan con rectitud.

Sin embargo, escuchamos con sorpresa al día siguiente las informaciones de parte de las autoridades que al senador Alirio Villamizar le habían incautado en su casa una suma cercana a los mil millones de pesos, sin explicación convincente y generando todas las dudas sobre el origen de ese dinero y del actuar del congresista. Sentí gran decepción y como ex congresista me sentí solidaria con el ciudadano del común, por lo que debe sentir, por su decepción razonable frente a la clase política y entiendo por qué se preguntan día a día, como creer en los políticos.

Debemos reflexionar profundamente ya que nuestra sociedad está en un nudo ciego, la gente buena y decente no se quiere meter en política porque implica mucho sacrificio y al otro día va a ser estigmatizado, y los que sí quieren participar en política actúan en no pocas oportunidades indecentemente, muchas veces van a llenarse los bolsillos aprovechando cualquier oportunidad.

Así las cosas creo que mientras no se eduque a los niños y jóvenes para asumir el derecho al voto como el deber ciudadano más importante para el bien de su comunidad, mientras se haga uso de este sagrado derecho y deber sin ninguna reflexión, a cambio de una dádiva o negocio, este país no vislumbrará soluciones cercanas y ciertas.

La educación es la base de una sociedad, pero esta debe dar prioridad a la formación del ser humano, como un ser integral para el cual los valores y principios sean fundamentales. Ojalá el Congreso se ocupe del proyecto de Ley Esperanza que presentamos en días pasados para lograr influir en algo sobre la formación de nuestros docentes, padres de familia y jóvenes.

La formación de los niños y jóvenes de hoy será fundamental para que actos bochornosos como el que un congresista utilice su curul para beneficio personal sea borrado en el futuro. También para tomar conciencia de que no se puede cometer la injusticia de que a quien no se le ha demostrado la culpabilidad en algún acto denunciado, no tenga un debido proceso, no pueda contar con las garantías para su defensa y no seguir estigmatizado por un proceso abierto sin resolución, sobrepasando todos los términos, atormentando la vida personal y familiar de un congresista que además es un ser humano y en este caso, como el de Nancy Patricia, quien valerosamente ha reclamado el trato digno y justo que debe impartir una justicia no politizada.



No hay comentarios: